Javier de Miguel Sáenz
Profesor de historia jubilado. Indignado desde hace más de cuarenta años.
12 de Octubre ¿Fiesta Nacional?
Han pasado los fastos de la "fiesta nacional" del 12 de octubre, ese día la "nación" se vio representada por un uniformado jefe de estado, no elegido democráticamente, ante el que desfilan cientos de hombres, algunas mujeres y una cabra.
Elementos de un ejército cuyos cuerpos, en pleno siglo XXI, celebran el día de su patrón o patrona, y no sólo como reminiscencias del pasado, la UME, de reciente creación, tiene también
su patrona, la Virgen del Rosario. Un ejército que tiene en nómina a funcionarios de la Iglesia Católica con rango y salario de oficiales. La imagen precisa de la vieja España de charanga y
pandereta, de Frascuelo y de María, la vieja unión del Trono y el Altar. Y ello en un contexto en el que nos preparamos para celebrar el Patrón de Navarra, San Francisco Javier, de la Virgen de la Almudena, de la Inmaculada Concepción el ocho de diciembre…y así hasta el infinito. Imágenes ante las que se presentan, todavía, serios y circunspectos, la mayoría de nuestras autoridades, estatales, autonómicas y locales, que deben representarnos.
Y es que la sombra del nacional catolicismo es alargada y pesada. Un nacional catolicismo que goza de buena salud cuando el presidente del PP señala, sin sonrojarse, que la colonización de la América Latina, "les llevamos nuestra cultura y nuestra religión" fue un hecho histórico sin comparación en la Historia Universal, bueno, quizás el Imperio Romano. Obvia, entre otros temas, el hecho de que la monarquía de los Austrias financió sus proyectos políticos-militares con el oro y la plata robados en un regímen de brutal explotación.
Coincide con el ¿pensamiento? político del Dictador. Franco creía que los siglos XVIII y XIX, la Ilustración y el liberalismo político, no digamos el socialismo, fueron un período negativo en la historia de España y remitía su proyecto político a la España Imperial.
Ya está bien.
Supongo que como todos los estados nación y las naciones sin estado, es inevitable que un estado plurinacional como España tengamos un día festivo, por ello, propongo que este día sea
el 19 de marzo. Es una fecha suficientemente alejada en el tiempo para no producir discordias significativas.
El 19 de marzo de 1812, las Cortes de Cádiz proclaman la primera Constitución. Una Constitución que tuvo una vida agitada, pero que en el siglo XIX fue el referente de quienes lucharon contra la monarquía absoluta y por la superación del feudalismo. Una Constitución que quedó abolida por un golpe de estado de Fernando VII en 1814. Un golpismo que inició una
costumbre borbónica, golpe en 1814, en 1875, en 1923, en 1936 y un oscuro papel en 1981.
Aunque fruto de su tiempo y por ello con concesiones a la Iglesia Católica y a la monarquía, con la Constitución de 1812 nace la ciudadanía, la soberanía nacional, el sufragio, la libertad de
prensa y los derechos individuales. "Españoles, aquí tenéis vuestra patria" dijo Agustín de Argüelles a los y las gaditanas al presentarla.
A partir de entonces, ¡VIVA LA PEPA! será un grito de libertad. Como tal podemos celebrar un día de la ciudadanía que una a todas las identidades y a todos los proyectos. Puestos a proponer, podríamos pensar en Iruña en celebrar, además de los diversos santos y la función de las Cinco Llagas, el día 29 de marzo, fecha en la que en la Pamplona de 1820, sublevado el coronel Riego, se restauró brevemente la Constitución. Además, como el himno de Riego fue el de la Segunda República, abriríamos las puertas al futuro, que más pronto que tarde,será republiano.