Pablo Idoate
“Hablaremos de ese vicio saludable que no entiende de sexo ni edad. Ése que traspasa fronteras más allá de cultura y religión. Crea amistades, levanta pasiones y, además, es gratis. Consumiremos deporte. Dosis sin límites.”
Herbadead
La verdad es que no estaba muy inspirado y me tocaba publicar columna. Como un poco de deporte siempre viene bien para activar el cerebro, esta mañana me he marchado a correr una carrera solidaria. Disfrutar corriendo, colaborar con una buena causa y acabar la mañana con unos potes con la cuadrilla. Buen plan para un domingo de octubre.
Y tras superar exhausto la meta, llega la inspiración en forma de pregunta: “por haber participado en la carrera te regalamos un estudio metabólico para dos personas, ¿me das tus datos?”.
Si no supiera que lo que me están ofreciendo es un anzuelo envenenado, hubiera aceptado encantado. De hecho estoy seguro de que más de la mitad del millar de corredores presentes habrán dado los datos ante semejante “chollo”. La empresa que está detrás de esta pregunta es Herbalife, multinacional americana dedicada a la comercialización de productos dietéticos.
Reconozco que en una ocasión fui a una de estas consultas. En el gimnasio había una imagen de Messi promocionando dicha marca junto a una hoja que decía algo así: “Deja tus datos y hazte un estudio de salud gratuito”. No sólo me apunté a mí, sino que quise que también mi familia disfrutase de semejante oportunidad, ¡encima gratis! En la consulta me pesaron, me midieron y me preguntaron sobre mis hábitos de alimentación y deportivos. Me recomendaron uno de sus productos “especial para deportistas” y unos batidos para tomar en lugar de mi café y tostadas de cada mañana. Mismo patrón con mi padre, con mi madre, con mi hermana, con mi novia y con todos los amigos que fueron desfilando por allí.
Antes de hablar sobre los productos “naturales” que venden, conviene referirse al personal de la empresa. Vamos, los supuestos nutricionistas. Ahí empieza el problema. Seguro que alguna vez has visto por la calle o en prensa anuncios del tipo: “Empresa líder en su sector busca personal. Altas posibilidades salariales. Trabaja desde casa”. Los comerciales, que no nutricionistas, que venden los productos tienen una formación nutricional ridícula, de algunos fines de semana realizando cursos de varias horas. Es decir, cualquiera puede trabajar como nutricionista en Herbalife. ¿Te dejarías operar por un cirujano que en lugar de médico fuese fontanero? ¿Contratarías a un médico si tienes una fuga en el baño? ¿Verdad que no? ¡Ah! y por favor, que nadie se atreva a decir que “es que la alimentación no es lo mismo que una operación” porque eso sólo demostraría ignorancia e infravaloración de la importancia de la nutrición en la salud.
En cuanto a los productos me voy a centrar en los productos más famosos que tienen, que son los batidos sustitutivos de comidas. De primeras, me parece una aberración sustituir una comida por un batido. Hay que comer comida, tomar un batido es escurrir el bulto. ¿Pero funcionan para adelgazar? ¡Por supuesto que sí! ¿Cómo no vas a adelgazar desayunando únicamente un batido con 170 kcal? A la palabra batido le acompaña, además, un adjetivo: natural. ¿Natural? Herbalife afirma que sus batidos alimenticios llevan vitaminas esenciales, minerales y nutrientes. Por razones obvias, se olvidan de mencionar la gran cantidad de otros que pueden resultar perjudiciales, varios de ellos transgénicos.
En realidad todo se explica cuando se sabe que Herbalife funciona como lo que se conoce como una estafa piramidal o marketing multinivel. Se llama así a un tipo de timo económico en donde los participantes deben “captar” nuevos clientes y vendedores con el objetivo de que los nuevos participantes generen beneficios a los participantes originales. Esto funciona mientras exista una cantidad suficiente de nuevos participantes. Cuando la población de posibles participantes se satura, los beneficios de los participantes originales disminuyen y muchos terminan sin ningún beneficio tras haber financiado las ganancias de los primeros. Esta práctica ilegal les ha llevado recientemente a tener que pagar 180 millones de euros para evitar ser denunciados por fraude.
En definitiva querido lector preocupado por tu salud y la de los tuyos, cuidado con Herbalife. El pasado mes de Mayo, tuvo lugar en nuestro pueblo la carrera Barañain-Tsunza donde esta empresa intentó estar presente. Por suerte varios de los organizadores la conocíamos bien y nos negamos en rotundo. Pero por lo visto hoy seguirán intentando estar allá donde haya clientes potenciales: carreras, eventos deportivos, gimnasios... Ya siento la chapa pero os tenía que avisar desde esta humilde columna. Consejo: a comer bien y a hacer deporte. Vamos, sin milagros, lo de siempre. Y ante la duda consulte con un nutricionista titulado.